Perder los dientes conlleva unos cambios en las estructuras cercanas a éstos, provocando molestias y dificultades masticatorias y, por consiguiente, problemas nutricionales y de salud en general.
Estos cambios se ven claramente en los pacientes que han perdido todas sus piezas y se conocen desde la antigüedad, tal y como lo representó Leonardo da Vinci en el s. XV. Da Vinci dibujó claramente los cambios estéticos que se producen por la disminución del tercio inferior de la cara, giro antero-superior de la mandíbula y hundimiento del hueso maxilar situado debajo de la nariz, produciendo el popularmente conocido como ‘perfil de bruja’.
Éste se define por una alteración ósea, por la que apreciamos una disminución en la anchura y en la altura del hueso de soporte, aumentando así la facilidad de fracturas mandibulares y de puntos dolorosos al tacto debido a la aparición de picos y líneas de inserción musculares.
En lo que respecta a los tejidos blandos, hay una disminución progresiva de la encía, la cual se vuelve a su vez más delgada y aumenta la facilidad de heridas a los roces. Por su parte, la lengua también experimenta un cambio: aumenta su tamaño, puesto que debe adquirir un papel mas activo en la masticación.
Todos estos cambios provocan movilidad en las prótesis removibles, las tradicionales ‘dentaduras de quitar y poner’, ya que tienen menos soporte y sus inserciones musculares están más cerca del hueso, elevando o despegando la prótesis al hablar o mover los músculos faciales para comer o gesticular.
Además, en casos extremos se puede llegar a producir una disminución de la sensibilidad por compresión de los nervios próximos a la prótesis, modificando y reduciendo la calidad de vida de cualquier persona.
Por todo ello, es conveniente reponer los dientes que haya que extraer por motivos de caries, traumatismos o desgaste excesivos, a fin de mantener las características originales de nuestra boca, manteniendo una apariencia joven y atractiva que nos permita sentirnos bien con nosotros mismos y que, por encima de todo, nos ofrezca facilidades masticatorias y calidad de vida en nuestra rutina diaria.
Consulte con su odontólogo de confianza si desea conocer cómo poder hacerlo, manteniendo al máximo su nivel óseo y asegurando un futuro en condiciones óptimas.