Aunque, como ya dijimos anteriormente en otra entrada de nuestro blog, en los casos en que se combinan tratamientos de ortodoncia e implantes dentales es deseable que ortodoncista y cirujano oral planifiquen cuándo es mejor poner los implantes, si antes o después del tratamiento, en algunos casos la realidad supone que un paciente que es portador de implantes dentales decide mejorar su estética y su ‘mordida’ con ortodoncia’.
En esos casos, el ortodoncista será el que valore, con arreglo a la posición inicial de los implantes, cuál es el tratamiento más adecuado, o si existe alguna limitación por la posición de los mismos. De este modo, dependiendo de su ubicación, puede resultar incluso favorable que los implantes estén colocados previamente para ‘anclarnos’ en ellos y mover el resto de la dentición de manera más sencilla y predecible.
¿Y puedo usar ortodoncia plástica?
Para saber si su tratamiento es predecible con ortodoncia plástica, mediante técnicas como Invisalign, es recomendable que acuda a un ortodoncista experimentado en esta técnica, que valore su caso y determine cuál es la mejor fórmula para llevarlo a cabo.
En casos como el que veremos a continuación, una de las ventajas que nos ofrece Invisalign es que, al haber dientes que no se mueven, que serían los correspondientes a los implantes dentales, tenemos un punto fijo sobre el que realizar fuerza para llevar al resto de los dientes a su posición ideal, de forma fácil y predecible.
De este modo, en la imagen de superposición, en la que vemos en azul la posición inicial de los dientes, y en blanco la posición final, vemos cómo los implantes dentales, señalados con una flecha verde, no se mueven durante todo el tratamiento, mientras que el resto, conforme el alineador se ‘acorta’ (ya que en este Clincheck se corrige una posición dental excesivamente adelantada), se van desplazando de forma fácil y predecible.
Además, al emplear Invisalign con casos como el que hemos presentado hoy, el paciente se beneficia de diversas ventajas que le aporta una técnica de ortodoncia plástica removible:
– Mayor comodidad, al no existir elementos que puedan irritar la encía del paciente como con las técnicas tradicionales de brackets
– Mejor higiene, ya que la limpieza dental se realiza con normalidad, retirando los alineadores y quedando los dientes descubiertos como de forma habitual
– Máxima estética, puesto que los ‘aligners’, al ser transparentes, resultan prácticamente imperceptibles al hablar o sonreir
– Mínimas urgencias, debido a que no hay elementos que puedan romperse, obligándonos a acudir a la clínica dental donde nos tratamos
– Elevada motivación, gracias a que el paciente ve desde el primer día el resultado final del tratamiento en el software Clincheck
– Normalidad profesional y personal, que se consigue mediante la retirada de los alineadores en reuniones de trabajo o citas importantes: para que la vida del paciente siga su curso, sin que le afecte el tratamiento de ortodoncia
