Habrás escuchado hablar muchas veces de implantes dentales, pero no se suele explicar bien en qué consisten o de qué material están hechos. Si te quedas conmigo, en este artículo te aclararé algunas de esas dudas.
Una manera de definir un implante sería el “tornillo metálico” que sustituye a la raíz del diente perdido o inexistente, y que permite colocar sobre él una corona que nos hará recuperar el diente.
Gracias al anclaje biológico de uno o varios implantes podemos reponer los dientes perdidos mediante una prótesis, y recuperar tanto los aspectos funcionales de los mismos como la estética deseada.
¿De qué material están hechos los implantes?
Sólo unos pocos materiales permiten una unión íntima y estable del implante al hueso, que técnicamente se denomina osteointegración.
El mercado de los implantes está en auge, surgen nuevas casas comerciales y nuevos productos continuamente, y es lógico, ya que es el tratamiento de elección para reponer los dientes perdidos. Oirás hablar de materiales (titanio, zirconio, tantalio), de conexiones (cono morse, interna, externa), de superficies (pulidas, chorreadas, de hidroxiapatita)…
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A modo resumen, podemos decir que los implantes más estudiados y con más evidencia científica son los implantes de Titanio Grado 4. Es un metal no magnético, biocompatible, altamente resistente a la corrosión y que soporta elevadas presiones. Por estas cualidades, resulta ideal para la construcción de implantes quirúrgicos y odontológicos sometidos a altas exigencias mecánicas y biológicas, y de hecho, es el mismo material que se usa en otras prótesis del resto del cuerpo como, por ejemplo, la cadera.
¿Qué partes tiene un implante?
Habitualmente llamamos implante a todo el conjunto pero, en realidad, el implante es tan solo la parte que esta dentro del hueso. Un “implante” esta compuesto por:
- Implante o tornillo de titanio: es la parte que está en contacto con el hueso y sustituye a la raíz de un diente perdido o ausente.
- Pilar o aditamento: es el nexo de unión entre el implante, y la prótesis. Amortigua y transmite las fuerzas que recibe el implante, y es una parte fundamental para que el conjunto sea estable y funcione a largo plazo.
- Prótesis: la prótesis es la parte externa, la que veríamos a simple vista. Con prótesis podemos referirnos a una funda estética de porcelana, a un puente (varias fundas unidas) o a una prótesis completa como las convencionales, pero que se anclan firmemente a los implantes, haciendo mucho más cómoda la masticación.
¿En qué se diferencian los dientes de los implantes dentales?
Las principales diferencias las encontramos en que es un elemento inerte, con la ventaja de no sufrir caries. En cambio, carecen de algunas estructuras que le permiten proteger y avisar al organismo, estas son:
- Ligamento periodontal: une el hueso al diente y le permite amortiguar las fuerzas y darle posibilidades de movimiento, por ejemplo, durante la ortodoncia.
- Pulpa o sistema neurovascular: son los nervios y vasos sanguíneos que le dan vitalidad y flexibilidad al diente. A la vez estos avisan de diferentes estímulos como el calor o el frío.
- Encía: los implantes se quedan envueltos en la encía, como los dientes, pero no se produce una unión íntima entre la encía y el implante. Es muy importante que los implantes se mantengan limpios y la encía no inflamada. Así, evitaremos la peri-implantitis, que es la contaminación e infección del hueso que sujeta el implante, y que puede suponer que perdamos nuestros implantes.
Esperamos haber aclarado las dudas que tuvieses respecto a los implantes dentales. Si aún tienes alguna pregunta, puedes utilizar la sección de comentarios y te responderé encantado.