La endodoncia funciona

Seguramente habrás escuchado a alguien decir que le ha fracasado una endodoncia, que al final han perdido un diente al que le “mataron el nervio”, o que se les ha partido una muela y que han tenido que quitársela. Como todo en la vida, esto tiene su parte de verdad y su parte de mito, si sigues leyendo te explico el por qué.

La endodoncia de un diente, desvitalización, o coloquialmente “matar el nervio” es de los tratamientos más exitosos que se realizan en las clínicas dentales, siempre que se haga adecuadamente por un profesional que domine la especialidad. Este tratamiento nos permite conservar un diente que se ha infectado, gracias a que eliminamos la parte viva, o pulpa dental, y conservamos el resto del diente.

Pronóstico

 El éxito de un diente endodonciado, es de aproximadamente el 96%, aunque depende de las condiciones en que esté el diente, sobre todo el tamaño de la caries o fractura. Cuando fracasa y finalmente hay que extraerlo, sólo uno de cada cinco casos es por culpa de la endodoncia. Nada mal, ¿verdad?.

En el resto de casos el problema es debido a la resistencia del diente, que disminuye después de hacer la endodoncia, pero esto tampoco es tan exacto. 

Tradicionalmente se decía que hacer la endodoncia deshidrataba el diente y afectaba a su rigidez, provocando más fracturas, como le pasaría a la rama seca de un árbol. En cambio, haciendo los estudios adecuados, se ha descubierto que la rigidez del diente sólo se ve afectada en un 5%, el resto es debido a lo grande que fuese la caries originalmente.

Reendodoncia

Pero, ¿qué pasa en esos casos en los que sí ha fallado la endodoncia y el diente sigue infectado?

Probablemente se deba a una técnica incorrecta, y la solución suele consistir en repetir el tratamiento. A esto se le llama reendodoncia.

Hacer una endodoncia por segunda vez, o reendodoncia, es especialmente compicado debido a que ya no sólo dependemos de las condiciones propias del diente, sino que también dependemos del tratamiento previo que se haya realizado, que lo más probable es que nos dificulte al hacerlo nosotros.

Las tasas de éxito son menores al hacer una reendodoncia que si hacemos la endodoncia de primeras.

A parte de lo comentado anteriormente, se debe a que las bacterias que sobreviven a la primera endodoncia son las más resistentes, y cuando se reproducen nos es mucho más difícil eliminarlas completamente.

Aún así, la reendodoncia funciona, aproximádamente en 3 de cada 4 casos. Os muestro unas imágenes de ejemplo en las que se ve como es así.