La importancia que se concede a la estética facial y, en concreto, a la sonrisa, ha crecido enormemente en los últimos años, existiendo estudios que relacionan el éxito profesional y laboral con una sonrisa bonita y armónica e, incluso, que hablan de la felicidad o de mayores oportunidades de éxito sentimental de una persona con dientes blancos y simétricos.
Por ello, la ortodoncia moderna insiste cada vez más en el tratamiento con aparatología lingual (por detrás de los dientes, de forma que los brackets no se ven), en un intento de facilitar a todo tipo de pacientes su alineación dentaria de la forma más discreta posible.
Antes de comenzar un tratamiento de este tipo, muchos pacientes de la Región de Murcia y de todo el mundo preguntan distintas cosas, en ocasiones asociadas a ‘leyendas urbanas’, como:
– ¿podré hablar?
– ¿hará mucho daño en la lengua?
– ¿es más incómoda que la ortodoncia vestibular para comer?
La respuesta a estas preguntas es clara: NO. Se trata de un tratamiento similar a una ortodoncia convencional, pero muchísimo más estético y completamente invisible. Y, muestra de ello, son los testimonios de pacientes satisfechos.
Esto es algo que numerosos estudios científicos han valorado, resultando que no hay una diferencia significativa entre portadores de ortodoncia convencional y ortodoncia lingual en aspectos como la masticación, la higiene diaria, o la satisfacción con el tratamiento.
De este modo, vemos como simplemente se trata de una nueva zona de aplicación de los brackets, que afectan más a la lengua que los brackets vestibulares, que están próximos a la cara interna de las mejillas, algo que en manos de un ortodoncista experimentado no es un inconveniente para obtener unos excelentes resultados en el tratamiento.