El mal aliento es un problema bastante común y que causa gran impacto en la vida de los pacientes que lo sufren. Normalmente, cuando una persona sufre mal aliento, tiende a distanciarse un poco de sus interlocutores y/o ser más retraído de lo normal en situaciones que afectan a su faceta profesional o personal. Por eso, aquellos que padecen halitosis, suelen buscar una solución a la misma, aunque muchas veces sea de la forma inadecuada.
La halitosis puede originarse por diversas razones, siendo la más común la acumulación de bacterias en la boca. La falta de higiene oral permite que estas bacterias se reproduzcan y liberen compuestos sulfurados malolientes. Además, problemas dentales como caries, enfermedad de las encías o infecciones pueden contribuir al mal aliento. En algunos casos, la halitosis puede ser un signo de problemas de salud más generales, como problemas estomacales o diabetes.
Consejos para combatir la halitosis:
- Higiene bucal rigurosa: El cepillado regular después de cada comida y el uso de hilo dental son fundamentales para eliminar las partículas de alimentos y prevenir la acumulación de bacterias.
- Visitas regulares al dentista: Programar revisiones periódicas con nuestro equipo dental permite detectar y tratar problemas bucales antes de que se conviertan en causas de halitosis.
- Enjuague bucal: Utilizar un enjuague bucal antibacteriano puede ayudar a eliminar las bacterias que causan el mal aliento. Sin embargo, es importante no depender únicamente del enjuague bucal y mantener una buena rutina de higiene oral.
- Hidratación constante: La saliva juega un papel crucial en la prevención del mal aliento al ayudar a eliminar las partículas de comida y neutralizar los ácidos en la boca. Beber suficiente agua durante el día contribuye a mantener una producción saludable de saliva.
- Evitar alimentos y bebidas que causan mal aliento: Alimentos como cebollas, ajo y bebidas con cafeína pueden contribuir al mal aliento. Reducir su consumo puede ayudar a mantener la frescura en la boca.
- Cuidado de las prótesis dentales: Si utiliza dentaduras postizas u otros dispositivos, es crucial limpiarlos adecuadamente para evitar la acumulación de bacterias y residuos.