Un tratamiento de ortodoncia para alinear los dientes de un pacientes, consiguiendo una masticación funcional y una estética sobresaliente, exige que el paciente lleve durante un tiempo brackets o alineadores transparentes, algo que, en muchas ocasiones hace que una persona no se decida a mejorar su sonrisa y su oclusión por miedo a un tratamiento largo.
Conscientes de ello, los ortodoncistas han colaborado durante numerosos años con la industria odontológica para desarrollar productos que permitan agilizar los tratamientos, entre los que podemos destacar los brackets de autoligado.
¿Qué es un bracket autoligable?
Los brackets tradicionales sujetan el ‘arco’ o ‘alambre’ mediante unas pequeñas gomas, que en ocasiones el paciente pide que sean de colores para iluminar su sonrisa.
Estas ‘gomas’ tienen diversas limitaciones:
– A las pocas horas de estar en contacto con la saliva, se degradan hidrolíticamente y pierden parte de su fuerza, por lo que el arco no entra totalmente en la ranura del bracket
– Pueden teñirse hacia un color más oscuro, especialmente en pacientes fumadores o consumidores de grandes cantidades de vino y/o café
– Al mantener el arco o alambre dentro de la ranura del bracket, lo rozan, generando una fricción que impide un deslizamiento del arco a lo largo del bracket
Frente a ellas, los brackets autoligables ofrecen las siguientes ventajas:
– Mantienen siempre el color original
– Mantienen la fuerza ideal aplicada al arco y… ¡el número de citas!
– Reducen la fricción y… ¡el tiempo de tratamiento!
De este modo, los brackets autoligables, entre los que podemos encontrar algunos como los SmartClip o Clarity SL, ambos producidos por el fabricante 3M, permiten reducir los tiempos de tratamiento en la fase inicial de alineamiento. Además de ello, al no ser necesario sustituir los elásticos, el ortodoncista puede sugerir al paciente que las visitas a la clínica se realicen cada 8 ó 10 semanas, en lugar de cada 4 semanas, como se ha hecho tradicionalmente con los brackets de ligado mediante elastómeros.
De modo que, ya sabe, si se está planteando un tratamiento de ortodoncia en la Región de Murcia, contacte con un profesional experimentado y plantéele su deseo de emplear brackets autoligables para reducir al máximo el tiempo de tratamiento, algo que en la mayoría de los casos estará en torno a los 18 meses con estas técnicas.