¿Qué es el disyuntor en ortodoncia?

El disyuntor es un aparato que se coloca en el paladar y que se utiliza en ortodoncia interceptiva para corregir los problemas que un paladar estrecho (con diferencias entre el tamaño del hueso del maxilar y la mandíbula) causa en niños en edades de crecimiento.

Este último punto es importante, ya que el disyuntor solo es efectivo en edades tempranas, hasta los 12 años. Si este paladar estrecho no se trata a tiempo, derivará en problemas más severos en el adulto, cuya única solución pasa por la cirugía ortognática combinada con el uso de ortodoncia.

El objetivo principal de este aparato es hacer más ancho el paladar para así poder solucionar estos problemas.

¿Por qué aparece el paladar estrecho?

Son varias las razones que pueden llevar a un niño a sufrir de paladar estrecho, entre las que se incluyen la respiración oral, la falta de sellado labial, la deglución atípica o la succión digital, entre otros.

¿Qué consecuencias tiene?

Esta discrepancia de tamaños entre maxilar y mandíbula, genera varios problemas como son el apiñamiento dental, problemas en la erupción de los dientes, mordida cruzada o dificultades respiratorias.

En algunas ocasiones estos problemas pueden ser realmente serios, ya que los apiñamientos dentales graves generan deficiencias en la higiene dental que llegan a provocar enfermedades periodontales.

¿Cómo funciona un disyuntor?

Dibujo de David Brugarolas

Según las características clínicas de cada paciente, diseñamos un aparato específico, pero en general encontramos un aparato que se cementa en los molares superiores y que está compuesto por material acrílico y metálico. En la zona de unión, que se encuentra en el paladar, está el tornillo de activación.

Es con la activación de este tornillo con la que se genera la fuerza que provoca la expansión del paladar. Este no es un proceso doloroso para los niños, sólo notarán una pequeña presión en cada una de las activaciones, que se realizarán en casa por los padres siguiendo siempre las indicaciones facilitadas por nuestras ortodoncistas para su caso en concreto. Debido principalmente a esto último, es importante acudir a las revisiones en clínica para garantizar el éxito de estos tratamientos.

El tratamiento durará entre 7 y 12 activaciones (o lo que llamamos ‘días de tratamiento activo’) dependiendo de la compresión ósea de cada niño y la planificación que se haya considerado adecuada en base a ella. Durante estos días es cuando se produce la expansión del paladar y se soluciona el problema, aunque generará (muy posiblemente) un espacio entre los incisivos superiores. Sin embargo, no debemos preocuparnos, ya que dicho diastema se cerrará espontáneamente en unos 20 o 30 días tras finalizar el periodo activo.

¿Y después?

Cuando la expansión del paladar haya finalizado, se dejará el tornillo en una posición fija para evitar que se produzca ningún movimiento innecesario ni retroceso en el tratamiento. Se mantiene así entre 6 y 8 meses, para así asegurar la regeneración del hueso y mantener la estabilidad del tratamiento.

Pautas de higiene

Al llevar un aparato fijo en la boca, la limpieza dental debe ser más minuciosa. Es posible que se almacenen restos de comida en el área del paladar, así que los padres deberán vigilar que los niños se cepillan los dientes de forma adecuada tras cada comida y que las zonas en las que el disyuntor se fija a la boca se han repasado.

Los consejos habituales a la hora de cepillarse adecuadamente son parecidos a los de cualquier otro tipo de ortodoncia fija. Por ejemplo, siempre es recomendable enjuagarse la boca con agua y escupir con fuerza antes de proceder al cepillado, para así eliminar los restos de comida que hayan quedado alrededor del aparato. Además, es importante limpiar la zona palatina del disyuntor, para lo que se suele utilizar un bastoncillo para los oídos, sobre todo en la zona de ajuste.

El cepillado deberá ser como siempre, desde la encía hacia el diente y con movimientos precisos y de barrido, tratando de limpiar los dientes y el aparato a la misma vez en las zonas en las que se unen. Como siempre, debemos servirnos de elementos auxiliares como los cepillos interproximales o el hilo dental para realizar una limpieza eficiente y podemos terminar con algún colutorio.

Y siempre, siempre, repasado por los padres. Una buena higiene será fundamental durante este periodo para prevenir futuros problemas de encías y dientes.

 

Hasta aquí nuestro artículo sobre el disyuntor palatino y su uso ortodóncico. Si queréis hacernos llegar alguna consulta, podéis utilizar los canales habituales a través de las redes sociales y la sección de comentarios.

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